Alfombra roja, emoción, sorpresas, shows, tributos y estatuillas... La gala de los premios Mercedes Sosa tuvo todo lo que se le pide a las grandes ceremonias en escala tucumana, dedicada a los realizadores independientes de la música y a todo lo que rodea ese universo creativo artístico.
En esa mirada amplia, Carina Fraszczak construyó un reconocimiento que traspasó fronteras, como los propios artistas locales. Y un ejemplo de ello es el galardón de oro, el máximo premio, que recayó en Lucas Aráoz, el músico tucumano radicado en la Capital Federal. Esa consagración fue su cierre de una noche perfecta: ya se había impuesto en las categorías de mejor compositor por “Ñandubay”, y mejor colaboración por la grabación de su tema “Mis penas” junto a Ricardo Mollo. Antes de cerrar su viaje, este viernes estará en CiTá Abasto de Cultura (La Madrid 1.457) con un recital acústico de despedida.
El escenario del teatro municipal Rosita Ávila, donde se desarrolló la gala, no le era extraño a Aráoz ya que cantó una de sus composiciones en una varietté en febrero, durante un evento relacionado con el proyecto cinematográfico de su padre, Nicolás Aráoz, para rodar “Barcos y catedrales”, donde también participó su abuela Inés Aráoz en poesía. Tampoco debutó en los Mercedes Sosa: en 2020 tuvo otra triple nominación, y ganó en canción del año por “Cerca de vos”. En su último disco (disponible en las redes sociales, pero aún no presentado en recitales en ningún punto del país) confluyen distintos géneros y estilos.
La convocatoria de Fraszczak ya no se limita al territorio tucumano, por lo que muchas distinciones se fueron lejos de la provincia. El Mercedes Sosa de Plata fue para Bele Música, la cantante porteña dedicada a las infancias que se transformó en una excepción porque la categoría dedicada a ese rubro quedó vacante por falta de inscriptos. “Es una alegría que existan espacios como este en donde lxs artistas emergentes tienen lugar, donde los proyectos federales son protagonistas, donde se da un espacio de inclusión y se honra a semejante artista como la Sosa”, resaltó la premiada.
El resto de los ganadores recorren el espinel de estilos. Como mejor álbum instrumental se impuso Initial Gravity, con “The unexpected”; en canción, “La última”, de Alunados; y en revelación, Marcos Canals Bonnet. Telemic fue el mejor grupo pop del año pasado, mientras que como solista resultó Luciana Tagliapietra. En folclore se reafirmó la proyección nacional del premio y se distinguieron diferentes expresiones: en tradicional fue para “Vidala en mi zamba”, de Eva Sola y Nadia Szachniuk (ganadoras del Gardel por esta producción, que rescata material norteño); en alternativo, la pianista misionera Flor Bobadilla Oliva con su disco “Solita mi alma” y en álbum solista “Alas sin pena”, de Eli Fernández (Tucumán).
El porteño Ariel Pirotti se impuso en tango (en 2017 fue nominado a los Latin Grammy 2017 y en 2016 recibió el Gardel 2016, como mejor nuevo artista de tango). También de la Capital Federal son Martín Giusta, ganador en solista de rock, el cantautor Franco Masciarelli y la compositora Lucy Patané (banda sonora en cine o musical por “Hekate”); mientras que la murga mendocina La Buena Moza se impuso como mejor conjunto coral y los marplatenses de Gastón de la Cruz Quinteto en álbum de jazz por “Hamal”.
En Tucumán quedaron las estatuillas de banda de rock para Ayahuasca Trip; cover para el jazz de Demodee y grupo tributo por Jardín de Gentes (homenaje a Fito Páez). En el campo del reggae y la música urbana, la estatuilla fue para PM; al tiempo que el Dj elegido fue Lucas López (“No estamos solos”) y en videoclip, Maze 2K con su canción “Vueltas”.
Salustiano Zavalía, además de conducir la ceremonia, se llevó el galardón “Nuestra voz” (hoy presentará un espectáculo en el teatro San Martín, ver “Salustiano...”) y hubo estatuilla homenaje para el rock de 448 y a la trayectoria del folclorista Lucho Hoyos.
Mejor conductora de TV
Asimismo se distinguió a quienes no suben a los escenarios pero son fundamentales, como Gabriela Baigorrí, cuya labor periodística en La Gaceta Play mereció la estatuilla como mejor conductora de la TV tucumana. Además se reconoció a Karina Moya en conducción de radio; a La Rockola Nacional como programa radial y a Vox Pópuli en televisión. Eduardo Picco se impuso en ingeniería de grabación del disco “Falú Falú”, de Martín Páez de la Torre por el centenario del compositor y guitarrista salteño Eduardo Falú; Javier Montalto como productor por “15 y 6”, del cantautor Martín García y Barrionuevo en diseño de portada con “Tucumán lleva acento”.